​​Minerva Ayón​ 

La tiotimolina resublimada es un compuesto que posee la capacidad de ‘predecir’ el contacto con el agua, lo cual provoca que se disuelva antes de tocar el líquido. Es una sustancia ficticia creada por el escritor Isaac Asimov que permite imaginar, a partir de una reacción química, los cruces simultáneos del pasado y del futuro en el presente. Con esta referencia de la literatura de ciencia ficción, la artista Minerva Ayón presenta tres instalaciones para esta muestra, las cuales, en conjunto, conforman un autorretrato.

 

Comúnmente, los autorretratos son obras que nos aproximan a la personalidad de las y los artistas; son formas de autorrepresentación que pueden centrarse en la apariencia física, en narrar una experiencia, en describir situaciones emocionales o en la expresión de una configuración ideológica. En el caso de las obras de Ayón, se manifiesta una reflexión en torno a la identidad autopercibida: un hallazgo complejo que incluye las historias de las personas que nos rodean para definirnos y la problematización de la idea de una construcción personal única, fija y estable.

 

La instalación Amor en reversa (2019) se refiere al cuerpo como fuente de calor y soporte vital; Solsticio de invierno (2020) retoma Las dos Fridas de Frida Kahlo para hablar de un desdoblamiento de la personalidad de Ayón y de la relación con su hermana; y El triunfo de los anormales (2022) insinúa el uso fetichista de las máscaras y el ejercicio disidente del deseo y la sexualidad. Con su trabajo, la artista propone pensarnos como seres endebles o inestables y experimentarnos como la tiotimolina, a partir de proyecciones del futuro y del pasado.

 

Silverio Orduña

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